Al pie de la letra respetó sus obligaciones: calzó zapatos de oficina de lunes a viernes, se amoldó a los acordonados prestados para ir al casamiento de su amigo, con el botín sin forma de los ´90 marcó un gol en el picadito de los sábados; pero en vacaciones y desnudo se transformó como una libélula y es pata.
Presurosa ya no por cumplir horarios sino porque la arena está que pela y hay que exorcisar la rutina en el mar.
Foto de Gonzalo Calvelo, además de reportero gráfico, original artista cuando la perspectiva lo pone de panza al sol.
Presurosa ya no por cumplir horarios sino porque la arena está que pela y hay que exorcisar la rutina en el mar.
Foto de Gonzalo Calvelo, además de reportero gráfico, original artista cuando la perspectiva lo pone de panza al sol.