domingo, 30 de noviembre de 2008

Notas al pie


Al pie de la letra respetó sus obligaciones: calzó zapatos de oficina de lunes a viernes, se amoldó a los acordonados prestados para ir al casamiento de su amigo, con el botín sin forma de los ´90 marcó un gol en el picadito de los sábados; pero en vacaciones y desnudo se transformó como una libélula y es pata.
Presurosa ya no por cumplir horarios sino porque la arena está que pela y hay que exorcisar la rutina en el mar.

Foto de Gonzalo Calvelo, además de reportero gráfico, original artista cuando la perspectiva lo pone de panza al sol.

viernes, 28 de noviembre de 2008

Apagón

Llueve. Después de soportar el noviembre más caluroso de la historia con 40º de sensación térmica, llueve. El sistema eléctrico colapsó y gran parte de la población pasó interminables horas sin luz, viendo cómo se derretía el hielo de la heladera y las aspas de los ventiladores sufrían una parálisis mórbida. Los teléfonos del diario ardieron como la temperatura. "Señorita, cuándo vuelve la luz?" fue la pregunta que se repitió hasta el hartazgo. Algunos hasta nos exigieron: "queremos la luz, ésto pasa por los hijos de puta que se compran equipos de aire acondicionado, Ud sabe lo que es estar con esta temperatura y sin ventiladores? . Las respuestas fueron primero formales: "estamos averiguando, en la edición de mañana salen todas las quejas reflejadas y para su consuelo quienes tienen aire acondicionado ahora tampoco pueden usarlo". Ante la insistencia impiadosa de otros, ya con un tonito más irónico respondimos: "somos periodistas, informamos, no podemos arreglar transformadores y devolverle la luz. Gracias por llamar".
Es increíble lo que puede conseguir el exceso de llamados de personas que preguntan lo mismo, si hasta el más urbano de mis compañeros ante la histeria colectiva terminó diciendo al cortar: ojalá se te derrita hasta el... teléfono!
...
Ah!!, pero después de un día así de duro es bueno llegar a casa y enterarte que la luz se cortó, pero cuando vos no estabas y que Juni que mañana tiene prueba de historia se sabe todo al dedillo:
-"Ma...los indios comechonguinos agricultaban maíz y habitaban cerca de Córdoba, ma... cuando Argentina no era Argentina, no había nadie más que los indios?".
Llueve, poco, pero llueve.
...

P/D: Clau, TKM, gracias por la foto. Mamu, feliz cumple, te amo.

miércoles, 26 de noviembre de 2008

El hambre no da rating

En el Día de la No Violencia Contra la Mujer para dos leonas que defienden a sus crías, los pibes hambreados de Altos de San Lorenzo.



Mabel y Cristina vivían en distintos pueblos de Jujuy, pero el hambre les sacó pasajes a la ciudad y llegaron a La Plata. Cambiaron aire, paisajes únicos, silencio y carnavalitos perfumados con albahaca por olla con fideos, escuela para sus hijos y changas. Como las cosas que están predestinadas se conocieron en el barrio y la charla las unió en preocupaciones compartidas . -"Muchos chicos del barrio no comen nada, están descalzos, necesitan ayuda", dijo Mabel entre decidida y enojada. A los pocos días Cristina abrió el humilde comedor de su casa y, aunque la vergüenza les quebraba la voz , pidieron alimentos. Con lo que juntaron , que no fue mucho, le dieron de comer a unos y otros. Colgaron a modo de cartel el viejo respaldo de una cama frente a la puerta y pintaron con tizas "Comedor Los Angelitos" .
-"El hambre es hoy, no mañana ni pasado", sentenció Mabel mientras se cansó de golpear encofradas puertas de despachos oficiales para pedir ayuda. -"Son chicos, también necesitan alimentarse de juegos, divertirse, reir, tienen derecho a conocer un parque de diversiones o tener un juguete", alegaron y un día las escuchó Marcelo Tinelli y les dijo que su comedor iba a estar representado en la nueva edición de "Patinando por un Sueño". Todos brillaron, las sombras fueron luces y aunque el morfi siempre fue escaso, se dieron un banquete de ilusiones. Los programas se sucedieron, los patinadores fueron sentenciados y perdieron, no tanto como los chicos del comedor "Los Angelitos" que siguen patinando, pero en el barro.

domingo, 23 de noviembre de 2008

Los 100 almanaques de Lucía.

No es difícil saber qué piensa Lucía. "En mi vida me han querido mucho", afirma locuaz, pero su mirada busca una amarilla hoja del calendario.
Aunque está arrugada y carga en su silla de rueda 100 años es imposible no verla como una niña envejecida.
"Quedé para semilla -destaca pícara-, mis hermanos y mis padres se murieron jóvenes".
Cortázar podría haberse inspirado en la melancolía de Lucía para crear a su Leticia de "Final del Juego" ; su parálisis infantil no le impidió enamorarse, pero sí la obligó a no casarse, "por mi defecto, viste?", susurra.
Siempre me pregunto en qué momento de la vida se detienen aquellos para los que el presente es simplemente todorecuerdo. "No tengo algo para rememorar como el mejor momento de mi vida, fueron todos, porque mis hermanos me han querido mucho, se peleaban para llevarme a vivir con ellos y hay noches en las que no puedo dormir pensando en mi familia", revela mientras saca sus lentes para que Pablo Busti la retrate.
Qué linda que sos Lucía!. Mezcla de abuela perdida y niña huérfana.
"Novios tuve muchos; amantes, nunca", categórica, certera. ¿En qué amarilla página del calendario anclaste tu sonrisa ahora?.

miércoles, 19 de noviembre de 2008

Sogas, soguitas


Los vecinos de la calle 81 esperaron por años que les hicieran el pavimento y en diciembre lo consiguieron. A los pocos días uno de los tantos autos que circulan por allí como si eso fuera una autopista se llevó puesto un nene que cruzaba la calle. Ahora juntan firmas para que la Municipalidad les permita hacer un reductor de tránsito, pero como está prohibido ellos atravesaron de costado a costado una soga gruesa que es lo que puede observarse en este primer plano del Mago Mékert.

viernes, 14 de noviembre de 2008

Los imputables del pegamento.

La propuesta de bajar la edad de imputabilidad de los menores que participan de delitos fue el "disparador" de esta movilización a la Casa de Gobierno que manifiesta el rechazo a la medida de distintas entidades sociales y de derechos humanos. Gonza Mainoldi capturó esta imagen en la que un chico se broncea a pocos metros, ajeno a todo. En pocas horas, cuando los manifestantes hayan partido y el joven esté mirando su tono bronce frente al espejo, los chicos de la calle, aquellos que integran la llamada "banda de la Plaza San Martín" volverán a adueñarse de la glorieta, a inhalar pegamento y a pensar en el negocio que visitarán mañana.

jueves, 13 de noviembre de 2008

Figuretis de cartapesta



Clausura en las canteras. La nota venía lisa, sin nada que investigar, el informe de la Municipalidad era muy completo, pero la indicación dada por mi jefe era llamar al político en cuestión. Para qué? no es necesario, tengo todo. No lo llamo. Final del día, llamadito de alguien de la Muni y la pregunta odiosa..."Llamaste a Montoto?". -No, no lo llamé. Sé cuando es necesario y no hacía falta. Después de eso se sucedieron maratones de "llamálo" en todos los tonos, imperativo, suplicante y hasta casi resignado y mis rebeldes retruques, "no soy empleada de la Muni y mucho menos una forra de los políticos!!!".
Pero la espinita quedó clavada. ¿Y si el tipo relamente tenía algo distinto o nuevo que decir?
Debí confiar en mi primer instinto.
-"Hola Montonto, habla Mónica".
-Ah!!! si qué necesitas?.
-Nada, Ud quería que lo llame...eso dijeron sus empleados.
-No..nada un artículo del informe que te mandé que se puede obviar, con las reglamentaciones, en fin, queda muy leguleyo, sacálo mejor.
-Fue lo primero que borré de un plumazo (en esta frase se me cayeron 30 años encima, pero no importa... fue como una guantazo en su rostro).
-Era eso nomás. Decime, la nota que me hiciste la semana pasada salio????
(silencio de radio)

Mirá si no va a saber que salió la nota!!!! Justo un aborrecible figureti de cartapesta va a omitir buscar su nombre en el diario...

Políticos, después nos preguntamos de qué se rien en las fotos de campaña...

viernes, 7 de noviembre de 2008

En el baño, carassius van, bebitos vienen.

Se veía como todos los días sólo que nadaba de costado. Nadaba? no, flotaba y no fue eso lo que más me llamó la atención, sino sus ojos que se veían inertes, en otro plano. El pobrecito fue. Creo que yo lo maté de un susto al cambiarle el agua. Desde que lo ganamos en la celebración del Bon Odori hasta acá se bancó muchas, nadó en aguas tan turbias como las del Mar Muerto y, menos guiso de lentejas, comió cuanta cosa pudiéramos triturar y arrojarle. Hace unos años Pilar me hubiera dicho: "no importa, mami, dejalo en la pecera que igual flota". Pero como adulta que soy, no tardé ni cinco minutos en determinar que había que darle un destino final. Y para él qué mejor que el agua. Tomé la pecera, la llevé al baño, cerré los ojos y lo volqué al inodoro. Una dudita macabra me asaltó... a ver si por esas raras cosas de la vida o de las cloacas, el chiquitín vuelve y lo ven las nenas... apreté el botón y ya.
Aunque suene loco en pocas horas un baño se puede convertir en un cementerio de peces o en una sala de parto, afortunadamente no en mi casa.
Al mediodía y con la consigna de llegar rápido, tuve que ir desde el diario al Hospital San Roque de Gonnet. Allí una mujer que aguardaba ser atendida por la guardia médica no aguantó más y dio a luz a su bebé en el baño de la sala de espera. La pobrecita tiene 16 años, es boliviana y como vive a casi 40 Km de donde vino a parir, había tenido que subir a un micro, apretar con sus manos la panza para retener al niño, morder sus labios y luego escuchar que la gente de guardapolvo blanco le dijera: -"No hay camas, esperá que atendamos a otra paciente y te revisamos".
La niña, empujada por un conocimiento ancestral, supo que la dulce espera había terminado. Se apartó de la habitación donde había decenas de personas esperando y fue al único lugar en el que podía encontrar algo de intimidad. En el baño, se puso en cuclillas y parió.

miércoles, 5 de noviembre de 2008

Faro querandí, pesadilla circular



276 escalones que te llevan hacia la luz del faro. La marcha es circular como el tiempo en las obras de Borges y por alguna razón una sensación primitiva te acelera, te perturba, te cansa, te hace temer. A mitad del circuito ya no sabés cuánto falta, quizás sea como la existencia misma. El aire se torna denso y uno puede imaginar una mujer que corriendo desde la playa se interna en él. Cuánto puede la fobia? un escalón y otro, otro, otro. Arriba más escalones y abajo? mejor ni mirar, sería perder la batalla. Ya estás. Todo es tan pequeño.Tocás las paredes, espiás por la ventana y le cerrás los oídos al viento para no sentirte más vulnerable.
El faro Querandí está en el sur de Mar de las Pampas, se construyó en 1922, en la segunda reserva dunística más importante del mundo. Pese a mi imaginación de pesadilla el cuidador del faro me contó que hasta ahora jamás nadie intentó tirarse desde lo alto y que lo más oscuro que les pasó fue quedarse sin luz por un corte de energía que no pudieron subsanar con los transformadores. Ja!

martes, 4 de noviembre de 2008

Los días que quedan


Suelo preguntarme qué queda de los días que simplemente pasan y festejar ocasiones cómo las que estás viendo. Pocas cosas son tan francas como las risas y el encuentro con amigos. En esos momentos el tiempo se acelera, pasa rápido, pero la memoria, ese buen recurso, los trae acá de nuevo para regresarnos a lugares como Tehuel en Las Gaviotas.